sábado, 3 de octubre de 2015

LAS REFLEXIONES DE ÁNGEL

     Aquí estoy, sentado en este lugar. El viento viene hasta mí para hacerme compañía, a brindarme su amistad. Esta naturaleza que nunca te falla, que siempre está ahí acompañándote en los buenos y malos momentos. Siento su caricia en mi rostro. Me conforta. Reflexiono junto a él sobre los últimos acontecimientos acaecidos en mi vida. Tengo frío, pero no me importa, me gusta sentirme arropado por este aire fresco que viene hasta mí a ofrecerme su cariño y protección. Estoy tiritando pero sigue sin importarme el frío porque me hace sentir vivo.


Sentirme vivo...procuro intentar siempre que esta sensación no se aparte de mí pero a veces es tan difícil. Vienen a mi mente uno a uno todos los episodios de mi vida. Todas las torpezas y los aciertos cometidos. Las desesperaciones y alegrías sentidas.

A lo lejos, se oye el aullido de un perro ¿me estará acompañando en mi tristeza? De nuevo el aire pega con fuerza en mi rostro y me invita a seguir en mi reflexión: "Si amigo, ya lo sé, quieres que te siga contando. Quieres paliar de nuevo, como lo haces siempre, esta soledad que me ha acompañado a lo largo de toda mi vida". ¿Te acuerdas como, cuando siendo un niño de cinco años quise volver atrás en mi vida? En mi inocencia infantil, intuitivamente, adopté ese día la posición fetal. Bajo mi "supuesta ignorancia" de niño pequeño, creí que era la forma de volver atrás en mi nacimiento. Sí, querida Brisa, quizás ya entonces intuía mi vida y esa soledad que con el tiempo se ha convertido también en mi amiga. Esa amiga que me ha hecho crecer en mi interior que me ha permitido percatarme de mi alrededor. De las necesidades ajenas. La falta de amor y comprensión que tenemos los unos con los otros. De los pequeños detalles de la vida y las personas. Esos detalles que si te fijas bien, tantas cosas nos cuentan y que tantas veces nos pasan desapercibidos.

Ha sido duro, muy duro pero he salido reforzado. Quizás, mi misión en esta vida era trabajar mi interior. No distraerme con las cosas cotidianas de la vida sino esforzarme a fondo en cultivar mi ser, careciendo de todos elementos y experiencias que son habituales en los humanos. Miles de veces me he preguntado ¿por qué yo no? pero creo que he obtenido la respuesta y a pesar de lo sufrido, estoy inmensamente feliz de haber pasado por todo porque la recompensa ha sido única.

Pues bien querido Viento, llegados a este punto, no sé qué me deparará la vida de aquí en adelante pero el Sol sale todos los días y algún día saldrá solo para mí.




Texto original de Carmen Peña

6 comentarios:

  1. Que bonito estas hecha una escritora, sigue asi que esa es tu ilusion y lo haces muy bien..Enhorabuena.

    ResponderEliminar
  2. Querida cuñada como ya sabes por conocerme bastante soy muy critico y desabrido pero de todo corazon te digo que esta muy logrado salvo que yo soy de la opinion que cuando salga el sol que salga para todo el mundo continua con tu ilusion y no decaigas sean cuales sean los comentarios un gran beso y sigue asi.Tambien te pido que me respondas a mi comentario. Besitos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Estimado cuñado, tus palabras son todo un halago precisamente por lo crítico que eres. Muchísimas gracias. Sabes que más que un cuñado eres un hermano, te quiero mucho. Por cierto, la frase final de Angel no es egoísmo, solo es una metáfora de la esperanza que tiene de que algún día la felicidad llegue a su vida.

      Eliminar
  3. Me siento muy identificado con tu "reflexión" tanto con la palabra Ángel, brisa, niñez,volver atrás, soledad, felicidad....y sobre todo Sol.
    Por supuesto que el Astro Rey sólo a veces sale y sus rayos son para ciertas personas, por lo cual lo hará también para ti.
    Ten esperanza sobre todo hoy Domingo día del Primer Rayo Azul Celeste de Protección y Fe.

    ResponderEliminar

Ir Abajo
Ir Arriba